Por Mónica Delgado Torres
El dato de inflación local en agosto (fuera del rango objetivo de Banxico) y un retroceso del dólar, ocasionado tras la decisión de política monetaria del Banco Central Europeo de mantener su tasa de interés en el menor nivel y enfocarse en lograr el objetivo de inflación, impulsaron la apreciación del peso.
Con ello, la paridad peso-dólar cerró en promedio en 21.27 unidades por dólar, su menor nivel desde el 10 de marzo de este año y 29 centavos menos respecto a su nivel reportado una semana antes o 1.4 por ciento menos, lo que implicó 5 semanas consecutivas de ganancias para el peso, su mejor racha desde diciembre de 2019.
En lo que va del año el tipo de cambio peso/dólar reporta un nivel promedio de 21.81 pesos por dólar y una pérdida acumulada de 2.34 pesos por dólar, de acuerdo con la Gaceta económica de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Banco Base, por su parte, destacó que el peso mexicano fue la divisa más apreciada en la canasta amplia de principales cruces, pese a que se observaron episodios de aversión al riesgo, particularmente en el mercado de capitales, en donde todavía existen riesgos a la baja para empresas del sector tecnológico.
El tipo de cambio FIX (que sirve para solventar obligaciones denominadas en dólares liquidables en México) reportó el 11 de septiembre un nivel de 21.3210 pesos por dólar, su segundo menor nivel desde el 11 de marzo de este año y 29 centavos menos respecto al dato observado el pasado viernes 4 de septiembre, 1.34 por ciento menos.
Durante 2020, el tipo de cambio FIX registra un nivel promedio de 21.8188 pesos por dólar y una depreciación acumulada de 2.46 pesos.
Para la entidad financiera, hacia adelante existen riesgos importantes para el tipo de cambio, ya que las remesas dependen del mercado laboral de Estados Unidos, así como el crecimiento de las exportaciones. Además, la razón de deuda sobre PIB se podría ver afectada por la caída de la actividad económica y la lenta recuperación de México.
