Por Alejandro Durán
Derivado de los embates provocados tanto por la emergencia sanitaria como por el perfil de la estrategia económica de la presente administración federal, la industria de la construcción transita por la peor racha de la que se tenga registro, pues durante julio de este año se desplomó 28.7 por ciento a tasa anual, con lo que acumuló 25 meses a la baja.
Por lo anterior, en el periodo comprendido de enero a julio de este 2020 reporta una caída acumulada de 24.6 por ciento, el peor balance para un periodo similar desde que se cuantifica el indicador en 2006.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, destaca que la adversa situación por la que atraviesa la industria de la construcción comenzó desde antes de la pandemia por el COVID19, pues la última vez que anotó cifras positivas a tasa anual fue en junio de 2018, a un mes de la victoria de Andrés Manuel López Obrador en las elecciones presidenciales.
“Cabe mencionar que la construcción ya mostraba contracciones significativas desde antes de la pandemia”, apuntó la especialista.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), precisó que la caída que reportó el valor de la producción de las empresas constructoras durante julio pasado fue resultado del desempeño negativo que reportaron los tres principales componentes: En la edificación se reportó una caída de 24.5 por ciento, mientras que en la construcción de obras de ingeniería civil fue de 32.2, en tanto que en los trabajos especializados para la construcción 33.6 por ciento.
En su comparativo mensual, la industria de la construcción reportó una ligera recuperación de 1.1 por ciento, con base a datos ajustados por estacionalidad.
El escenario adverso por el que transita la industria de la construcción se ve reflejado en la nómina del sector, pues durante el séptimo mes del año el personal ocupado en dicha actividad bajó 20 por ciento a tasa anual. De manera particular, el mayor ajuste se observó en la plantilla de obreros, con un recorte de 24.4 por ciento, mientras que el rubro de empleados el ajuste fue de 8.1 por ciento.