Redacción

Un testamento es sinónimo de tranquilidad y responsabilidad, pues brinda seguridad a la familia y evita posibles conflictos, además de ser un trámite sencillo y modificable, señaló la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), con motivo de la celebración de septiembre, Mes del Testamento.

Por medio de un reporte, la Comisión recordó que la elaboración de un testamento implica un trámite sencillo y lo puede tramitar cualquier persona mayor de 16 años, siempre y cuando esté en pleno uso de sus facultades mentales.

En ese sentido, refirió que el interesado sólo necesita una identificación oficial con fotografía, salvo en el caso de personas con alguna discapacidad (visual, motriz, auditiva o del habla) que necesita testigos.

Aclara que no es necesario tener inmuebles o dinero para hacer un testamento, toda vez que se puede heredar cualquier pertenencia acumulada en la vida, como un automóvil, los aretes de perlas, los cuadros de la familia, hasta las mascotas.

Cuando se elabora un testamento se puede disponer de las propiedades y bienes como se considere, y éste se pueden actualizar y modificar según sea la voluntad.

En el marco de la campaña “Septiembre, mes del testamento”, explica que hay diferentes modalidades de testamento: público cerrado, cuando el testamento o el sobre que lo contiene está cerrado y sellado; público simplificado, cuando en la misma escritura de adquisición de un inmueble destinado o para vivienda, se establece a los herederos.

O bien, el ológrafo, el cual es un documento escrito de puño y letra del testador, pero su efecto y alcance no es válido si no están depositados ante una autoridad competente; y los especiales, los cuales pueden ser privados y se realizan cuando el testador padece una enfermedad grave que no le permita acudir ante el notario público o no haya notario en la población.