Por Diana Domínguez Galván
La baja inversión el país mantiene en retroceso las ventas de la industria automotriz que en enero pasado ya alcanzó los 32 meses consecutivos de reducción en la comercialización de vehículos ligeros con una caída del seis por ciento respecto a igual mes del año anterior.
De acuerdo con las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante enero de 2020 la venta de unidades nuevas fue de 104 mil 832 unidades con retrocesos en prácticamente todas las marcas que se venden en el país.
Durante el primer mes del año Nissan se mantiene como la marca de mayor participación en el mercado mexicano con el 20 o por ciento del total de ventas, seguida por General Motors con el 15.6 por ciento, Grupo Volkswagen con el 14.6 por ciento, Toyota con el 7.8 por ciento, Kia con el 7.4 por ciento, Honda con el 6.3 por ciento.
El séptimo lugar en participación de mercado lo ocupó la japonesa Mazda con 4.6 por ciento,seguido por FCA México con el 4.5 por ciento, Ford con el cuatro por ciento y Hyundai con el 3.8 por ciento.
De estas marcas, Nissan reportó un retroceso del 10 por ciento en sus ventas, General Motors del 10.2 por ciento, VW aumentó sus ventas de enero en un 2.4 por ciento, Toyota retrocedió 9.3 por ciento, KIA Motors cayó 3.2 por ciento.
En tanto, Honda retrocedió 4.4 por ciento, mientas que Mazda lo hizo en 6.6 por ciento, FCA México decreció 11.1 por ciento, Ford 16.7 por ciento, en tanto que Hyundai creció en sus ventas 7.8 por ciento.
Destaca el crecimiento de la armadora China Jac con un incremento del 46.2 por ciento en enero de este año.
De conformidad a las expectativas de Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) el año 2020 continuará retrocediendo.
En este sentido, el director general adjunto del organismo, Guillermo Rosales Zárate, consideró que persisten en el sector factores negativos que influyeron mayormente en 2019 como la desconfianza empresarial que propicia caída en la inversión, lo que frena la creación de empleos formales, principalmente aquellos con los ingresos necesarios para adquirir un vehículo nuevo, estimándose esto a partir de cinco salarios mínimos.
Ante este panorama advirtió la urgencia de generar las condiciones políticas y económicas necesarias para recuperar la inversión y la capacidad de consumo en México.
Por otra parte, en lo inmediato es necesario aplicar un Programa de Fortalecimiento del Mercado Interno Automotor, coordinando acciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la banca de desarrollo y la Secretaría de Economía.
Asimismo enfatizó que es urgente frenar la introducción de vehículos de contrabando, por lo que la AMDA solicitó la intervención del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador para combatir el contrabando de vehículos.
En este contexto, Guillermo Rosales Zárate pidió al gobierno federal que establezca los mecanismos de coordinación política con el gobernador de Baja California Jaime Bonilla con el objeto de terminar con su iniciativa de regularización de vehículos de contrabando a partir de una iniciativa de Ley presentada al Congreso del Estado.
De continuar los estímulos para la introducción de contrabando se continuará agravando la crisis del sector automotor.