Redacción

La falta de interés del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en apoyar al sector productivo del país podría provocar que la pobreza por ingreso de México aumente pase de 61 millones a más de 70 millones de mexicanos al finalizar el año, alertó la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN).

Y lo anterior, explicó el asesor de la cúpula industrial, José Luis de la Cruz, porque miles de empresas mexicanas han visto desplomar sus ingresos en los tres últimos meses a causa de la emergencia sanitaria por el COVID-19, ante lo cual han tenido que recorte personal, acordar ajustes de salarios con sus colaboradores o de plano cese indefinido de operaciones.

“Si no va a haber apoyo de la banca de desarrollo, programas de reactivación continente, pues ¿Cómo vamos a tener una recuperación rápida? y la respuesta es el sector privado, si se le da certidumbre si se promueve la inversión privada, el sector va a poder seguir contribuyendo al desarrollo, la única alternativa  es generar el entorno  adecuado para que micro, pequeñas, medianas y grandes empresas, puedan sacar adelante al país; el costo de no hacerlo es, con las cifras que dio a conocer el INEGI, que la pobreza por ingreso podría pasar de más 61 millones a más de 70 millones de mexicanos al finalizar el año”, comentó.

En esa misma línea, Francisco Cervantes, presidente del organismo, afirmó que la inacción de la autoridad trae ya consecuencias devastadoras para la industria, como la pérdida de empleos y de empresas.

El presidente de la CONCAMIN señaló que los efectos del COVID19, serán a largo plazo y lamentó que en los diversos intentos de diálogo con la autoridad no hubo respuestas.

“Es penoso no haber podido traer de regreso de las mesas de análisis un acuerdo con la autoridad, sabíamos que el cero apoyo era  letal y se traduciría en una alta mortalidad de empresas y pérdida de empleos; hoy, así  como el 82 por ciento de los mexicanos temen infectarse del virus y más del 65 teme morir a causa de él es muy alto el porcentaje de dueños de empresas que se han tenido que declarar en quiebra y más aún, los que ven como único futuro, suspender en definitiva las operaciones de sus empresas”, afirmó.