Jaguar (Panthera onca), Pantanal, Brazil

El jaguar es un felino que tiene un importante papel en el mantenimiento de la estructura y función de los ecosistemas que habita, ya que no sólo es un depredador que ayuda a mantener el equilibrio y la salud ambiental de los sitios donde habita, sino que también ayuda a mantener la estabilidad económica de las regiones en donde se le encuentra.

Al celebrarse este 29 de noviembre el Día Internacional de Jaguar, resulta relevante el informe que presentó WWF, “Conectando Puntos: El impacto socioeconómico de los hábitats del jaguar en Latinoamérica”, el cual cuantifica la importancia de los hábitats de este emblemático felino y destaca su relevancia como bastiones de ecosistemas cruciales, generadores de servicios ambientales esenciales.

Foto Carlos Eduardo Fragoso WWF

De acuerdo con los resultados, los servicios ecosistémicos generados en 15 paisajes prioritarios para el jaguar, alcanzan un valor estimado de entre 1.5 y 4 billones de dólares al año, superando hasta seis veces la actividad económica de la región. Dichos sitios abarcan 244.3 millones de hectáreas en 14 países, generando anualmente 708.3 mil millones de dólares en actividad económica (comercio, transporte, educación y banca). Mientras que, por hectárea, aportan entre 15,800 y 22,200 dólares anuales en servicios ecosistémicos de aprovisionamiento, regulación y culturales, como la provisión de alimentos y recursos naturales, el suministro de agua limpia y la estabilidad climática que benefician a 62 millones de personas.

En este sentido, Roberto Troya, director Regional para América Latina y el Caribe de WWF, dijo que “el jaguar es mucho más que un símbolo cultural; representa un recurso estratégico para la estabilidad ambiental y económica de la región. Proteger sus hábitats significa también resguardar una fuente de riqueza natural que impulsa el desarrollo sostenible en América Latina”.  

Mientras que María José Villanueva, coordinadora de Conservación de Latinoamérica y el Caribe y Líder de la Iniciativa Jaguar de WWF, menciono que el informe que realizaron es un llamado a la acción para gobiernos, instituciones financieras, empresas y sociedad civil.

“Invertir en la conservación de los hábitats del jaguar no sólo es una responsabilidad ambiental, sino también una estrategia económica de alto valor. La importancia de estos ecosistemas debe ser reconocida y protegida con el compromiso de todos los sectores”, agregó. 

El jaguar  es el felino más grande del continente y desde hace varios años enfrenta serias amenazas debido a la pérdida histórica del 50% de su hábitat, la cacería en represalia y los cambios ambientales, entre otros. Actualmente, se estima que existen alrededor de 173 mil jaguares en 18 países de América Latina.