Por Alejandro Durán
En línea con la reactivación de la economía tras el confinamiento por el COVID19, la confianza de los consumidores afianza señales de recuperación, pues en julio de este año el indicador se colocó en 34.4 puntos, lo que representó un alza de 3.3 unidades respecto a mayo.
De esta manera, la confianza del consumidor se mantiene en recuperación, al mostrar un avance de 2.4 unidades de junio a julio de este año.
Sin embargo, cabe destacar que el indicador se coloca todavía muy lejos de los niveles de 47.2 por ciento alcanzados en febrero de 2019, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Es decir, la percepción de la población sobre la economía actual todavía se encuentra en niveles bajos, al igual que su intención de comprar bienes duraderos (televisión, lavadora o refrigerador), así como adquirir o remodelar su casa o irse de vacaciones.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, explicó que el comportamiento del indicador va en línea con el comportamiento de la pandemia en México, en donde los meses más intensos de la cuarentena (abril y mayo), fueron los más bajos que haya reportado el indicador.
“Al interior, destacan los bajos valores sobre la posibilidad de consumo de bienes duraderos y la situación económica actual del país, con 15.7 puntos y 28.5 puntos, respectivamente. Lo anterior, es consistente con el comportamiento observado durante los periodos de crisis, donde las personas muestran una mayor cautela en su gasto ante la incertidumbre sobre sus ingresos futuros, enfocándose en el consumo de bienes esenciales”, explicó la analista.
La Encuesta Telefónica sobre Confianza del Consumidor (ETCO), se llevó a cabo en el mes de julio su cuarto levantamiento, cuyo objetivo es generar información estadística cualitativa que permita obtener indicadores sobre el grado de satisfacción de la población acerca de su situación económica, la de su familia y la del país. Lo anterior posibilita monitorear la confianza del consumidor durante el periodo de contingencia sanitaria y aportar datos para el cálculo del Indicador de Confianza del Consumidor (ICC).