Redacción

De enero a la fecha se han registrado al menos 10 agresiones por parte de civiles a elementos del Ejército mexicano, en su mayoría debido al combate emprendido por el gobierno para eliminar el robo de combustible, fenómeno conocido como “huachicol”.

El último ocurrió apenas el pasado sábado 7 de septiembre, en donde fueron agredidos tres militares al intervenir para evitar que alrededor de 50 personas saquearan un tren de carga en el municipio de San Juan del Río, Querétaro.

Estos hechos se suman a la larga lista de agresiones que se han presentado  desde principios de enero, en los estados de México, Michoacán, Puebla, Hidalgo, e incluso en la capital mexicana, en donde han resultado lesionados diversos elementos del Ejército.

Por ejemplo, el 4 de septiembre pasado, tres policías militares también resultaron heridos, después de que fueron agredidos por manifestantes del Frente Nacional de Liberación Social, afuera de Palacio Nacional.

Los manifestantes, que se encontraban en espera de un diálogo con el presidente Andrés Manuel López Obrador, agredieron con palos a los oficiales cuando les impidieron instalar su campamento afuera de dicho recinto.

Mientras que el pasado 26 de agosto, habitantes del municipio de Los Reyes, en Michoacán, agredieron con palas, tubos y escobas a elementos del Ejército, luego de que personal militar detuvo a un presunto “halcón” (informante) de un grupo criminal.

Un mes antes, el 26 de julio, un grupo de “huachicoleros” atacó a personal de Seguridad Física Pemex, en la localidad de San José Carpinteros, en el municipio de Tepeaca, Puebla, quienes fueron retenidos por los habitantes.

El pasado 24 de junio, un grupo de hombres armados con piedras y palos agredieron a militares que pretendían ingresar a unas bodegas, en un operativo contra el robo de Gas LP en la colonia La Purísima, en el municipio de San Martín Texmelucan, en Puebla, una de las zonas de mayor incidencia en robo de gasolina y gas.

De igual manera, el 26 de mayo, habitantes de la comunidad Pueblo Viejo, en La Huacana, Michoacán, retuvieron a un grupo de militares de la 5a Compañía de Infantería No Encuadrada (5a/CINE), que habían decomisado armamento en posesión de civiles.

A ello se suman los hechos registrados el 28 de mayo, donde pobladores de la comunidad de Ulapa, en Tetepango, Hidalgo, impidieron a militares el decomiso de dos camionetas cargadas con combustible robado.

En enero, se registraron dos enfrentamientos más, el 25 de enero con habitantes del poblado de Cuautlacingo, Otumba, en el Estado de México, y el 16 de enero, con pobladores de Santa Ana Ahuehuepan, en Tula, Hidalgo.