Por Rosalba Amezcua
Tras advertir que el sector minero se mantiene “en picada”, el Secretario General de la Unión Nacional de Sindicatos Minero-Metalúrgicos y Metal Mecánicos de la República Mexicana, (UNASIM), Carlos Pavón Campos, llamó al gobierno federal a generar confianza y condiciones a los inversionistas, pues reconoció que el panorama es “muy preocupante”.
Al encabezar los festejos por el primer aniversario de su toma de nota, dijo que la baja producción ya es un foco rojo porque las empresas mineras no están invirtiendo, aunado a la inseguridad en todas las plazas del país, en donde día a día se agrava con el cobro de piso.
El también diputado federal por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), ante representantes de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, destacó que apuestan a que las cosas mejoren por el bien de su sector y del país.
“La UNASIM busca fortalecer aún más nuestra industria, hacerla atractiva para la inversión tanto nacional como extranjera, sin posiciones sindicales totalmente radicales o retrógradas, de confrontación o chantaje hacia las empresas como lo hace un dirigente sindical que ahora encontró acomodo en la 4T”, afirmó el dirigente de la organización que agrupa al 90 por ciento de los trabajadores mineros, metalúrgicos y metalmecánicos a nivel nacional.
El también Secretario General del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico FRENTE, subrayó que, a pesar de tener una representatividad mayoritaria, la UNASIM no “torpedea” a las inversiones con amenazas de retiro de concesiones hacia la industria.
“Nuestro discurso no es de confrontación”, por lo que dejó en claro que en todo momento se ha buscado mantener una relación respetuosa y propositiva con el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Por tal razón, mencionó que entre los grandes pendientes que se tienen con los mineros mexicanos se encuentra el que el impuesto minero sea utilizado para lo que fue creado, es decir, que sea dirigido a las comunidades donde se encuentran establecidas las minas del país, tema en el que precisó, seguirán insistiendo fin de que sean los estados y municipios los beneficiados de ese gravamen.
“Se trata de un impuesto que aportan las empresas mineras, no el gobierno y nosotros lo que buscamos es que se reparta en las poblaciones donde están enclavadas las mineras y sea gastado para lo que fue establecido”, señaló.