El peso mexicano terminó 2019 mostrando una apreciación de 3.86 por ciento o 76 centavos, cotizando alrededor de 18.90 pesos por dólar, tocando un mínimo de 18.7480 pesos el 20 de marzo y un máximo de 20.2580 pesos el 29 de agosto, de acuerdo con Banco Base.
“La volatilidad disminuyó en el año a 7.97 por ciento, siendo la más baja desde 2014. Por lo anterior, podría decirse que durante el año la cotización del peso fue estable, a pesar de todos los eventos que generaron volatilidad en los mercados financieros a nivel global”, agregó.
La institución financiera destacó que el tipo de cambio ha mostrado estabilidad en comparación con años previos debido a dos factores: la postura restrictiva de Banco de México que ha evitado que se observen flujos de capitales negativos en la cuenta financiera, a pesar de los recortes a la tasa de interés, así como al superávit comercial, que ha permitido la mayor entrada de divisa extranjera a México.
Señaló que a lo largo de 2019, el diferencial entre el tipo de cambio máximo y el mínimo fue apenas 1.51 pesos, el más bajo desde 2010 cuando fue de 1.25 pesos.
Banco Base resaltó que la apreciación del peso en el 2019 fue la mayor desde 2017, cuando el peso se apreció 5.15 por ciento o un peso y 7 centavos.
En esa ocasión, agregó, la disminución en el tipo de cambio se trató de una corrección, pues el peso se había depreciado considerablemente a finales del 2016 e inicios del 2017 por las elecciones presidenciales de Estados Unidos, tocando un máximo histórico de 22.0385 pesos por dólar el 11 de enero de 2017.
