Por Alejandro Durán

Presionado por alzas en energéticos y alimentos, la inflación en la primera mitad de junio fue de 0.32 por ciento respecto a la quincena anterior, lo que representó su mayor alza para un periodo similar desde el año 2002.

Así, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), resultó que el Índice Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se colocó en 3.17 por ciento a tasa anual durante la primera quincena de este mes.

Para dimensionar el actual comportamiento del indicador, cabe mencionar que en igual periodo de 2019 las variaciones que observó el indicador fueron de 0.01 por ciento quincenal y de 4.00 por ciento anual.

Según datos estadísticos del instituto, el INPC no había reportado niveles tan altos en la primera quincena de junio desde el año 2002, cuando avanzó 0.35 por ciento.

El INEGI precisó que durante la primera mitad de este mes, los productos y servicios que anotaron las mayores alzas en sus precios fueron el transporte aéreo (con un incremento de 16.42 por ciento); la naranja (10.85); gasolina de bajo octanaje (2.95); gas doméstico (1.57); electricidad (0.94); y gasolina de alto octanaje (2.06 por ciento).

En contraparte, los que mostraron los mayores descensos fueron chayote (-13.22 por ciento); limón (-9.77); chile serrano (-13.65); jitomate (-6.26); y calabacita (-6.83 por ciento).

Al interior del INPC, el índice de precios subyacente presentó un alza de 0.29 por ciento quincenal y de 3.66 por ciento anual, y el índice de precios no subyacente creció 0.39 por ciento quincenal y 1.63 por ciento anual.

En cuanto al índice de precios subyacente, los precios de las mercancías se incrementaron 0.43 por ciento y los de los servicios 0.15 por ciento quincenal.

Dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios retrocedieron (-)0.92 por ciento, en tanto que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno subieron 1.48 por ciento quincenal.