Redacción

El vocero de la recién constituida Asociación ConComercioPequeño, Gerardo López Becerra, advirtió lo anterior y planteó que ante esta situación, se debería crear un Fondo Económico Nacional de Apoyo al sector con recursos superiores a los destinados actualmente en los programas gubernamentales, el cual debería tener mayores plazos de gracia para la devolución de los recursos otorgados.

“Los dueños de negocios en pequeño que llegaron al límite de sus ahorros o saturaron las tarjetas de crédito durante los meses de inactividad y que requieren más de 50 mil pesos para financiar sus actividades, tienen como alternativas actualmente: préstamos de familiares o acudir con agiotistas”, argumentó.

Asimismo, se pronunció por un Plan Atención a la Emergencia Económica donde  los gobiernos, en sus tres órdenes de acción, atiendan con cuidado sus pagos a proveedores, agilizando los trámites de los pagos, desatorando los que se encuentran pendientes e incluso adelantando aquellos que están programados.

Aunque algunos gobiernos estatales y municipales lograron estructurar recursos para el apoyo de las pymes a través de programas especiales, la dimensión de las necesidades sólo alcanza a menos del 10 % del sector, aclaró el vocero de la Asociación ConComercioPequeño.

Sin embargo, reconoció que el esfuerzo del Estado a través del Programa “Prestamos a la Palabra” o “Tandas pare el Desarrollo” destinado a sectores muy desprotegidos de la micro empresa, locatarios de mercados públicos, tianguistas, taxistas y meseros, principalmente, para otorgarles un crédito de 25 mil pesos para sufragar los gastos de 3 meses de baja productividad o inactividad.

Pero, aclaró, para el pequeño comercio formal así como para las empresas familiares el monto antes citado es insuficiente ya que requieren un financiamiento mayor pues con 25 mil pesos no se financian los adeudos generados de marzo a junio de este año.

No hay que olvidar, precisó, que se debe considerar que además se debe costear el arranque de actividades con una perspectiva de lenta de recuperación ante la amenaza de nuevas interrupciones comerciales por la aceleración de contagios de COVID-19; de ahí que se requieran mecanismos consensados entre el Gobierno y sector empresarial para disminuir los impactos económicos y poder cumplir con los compromisos pactados.

Por otra parte, Gerardo Cleto López Becerra, dijo que en un alto porcentaje de casos, los funcionarios e inspectores de los giros mercantiles han sido conscientes de una nueva realidad y ésta debe aplicarse con prudencia.

De igual manera, el pequeño comercio y las empresas familiares han sido conscientes de la situación de la emergencia sanitaria y tratan de cumplir con los protocolos establecidos por las autoridades para que su actividad productiva no se vea interrumpida.

“Hacemos un llamado a las autoridades estatales como municipales para que las inspecciones de los establecimientos mercantiles se realicen con un toque humanista: evitar multas y cierre de establecimientos por fallas que son corregibles”, resaltó.

Nuestra Asociación “ConComercioPequeño”, expresó Gerardo Cleto López Becerra, constituida recientemente, busca colaborar en las campañas de difusión, orientación y apoyo para amortiguar los impactos negativos de la crisis económica para evitar mayores daños que generen el cierre de negocios y empresas familiares.