Redacción

La inflación en México continúa amenazada por presiones externas sobre
los precios y los cuellos de botella en la producción, condición que de alargarse
podría derivar en una descomposición de precios, alertó el Banco de México (BANXICO).

De esta manera, por medio de la minuta de su más reciente decisión de política monetaria, publicada el jueves, el banco central precisó que uno de los miembros de su Junta de Gobierno alertó de los riesgos inflacionarios que enfrenta el país, en virtud de que la variable se apunta hacia un seis por ciento para el cierre de este año, es decir, muy lejos del rango objetivo de entre dos y cuatro por ciento que plantea el propio instituto central.

“Otro
(miembro de la Junta de Gobierno); resaltó que la inflación ha repuntado consistentemente,
acercándose a niveles de seis por ciento, a pesar de que la actividad económica
sigue por debajo de sus niveles prepandemia, que el empleo no se ha recuperado
lo suficiente y que el crédito al sector privado continúa contrayéndose. Agregó
que la persistencia de altos niveles de inflación por un periodo prolongado
puede contaminar el proceso de formación de precios y provocar el desanclaje de
las expectativas”, expuso el documento del BANXICO.

Al respecto, cabe recordar que el mes pasado,
la autoridad monetaria elevó por tercera vez consecutiva la tasa clave en 25
puntos base, a un 4.75 por ciento, en una decisión dividida, mientras revisó al
alza sus pronósticos sobre la inflación citando presiones que, aunque
transitorias, podrían implicar riesgos para la formación de precios.

La mayoría de la junta de gobierno de Banxico
consideró en la minuta que el balance de riesgos para el índice de precios al
consumidor en el horizonte de pronóstico es al alza, y señaló que las
expectativas de la inflación general para 2021 y 2022 volvieron a
incrementarse.

“Las presiones inflacionarias globales y los cuellos de botella en la producción continúan afectando a las inflaciones general y subyacente”, mencionaron todos los miembros de la junta.

En
septiembre, la inflación interanual en México se aceleró hasta un 6% para
duplicar la meta oficial permanente de un tres por ciento, impulsada por alzas
en los precios del gas doméstico LP y algunos productos agropecuarios.

La mayoría
de la junta de gobierno también destacó la recuperación heterogénea de los
distintos sectores económicos, mientras subrayó que las manufacturas siguen
resintiendo la escasez de insumos, especialmente en los sectores más integrados
a las cadenas globales de producción, como el automotriz.

En lo que va de año, el sector automotor
mexicano ha sido duramente golpeado por el desabasto global de insumos como
chips, por lo que solo en septiembre la fabricación local de vehículos cayó un
33.3 por ciento a tasa anual, mientras las exportaciones retrocedieron un 24.2
por ciento.