Redacción

Ante el creciente y real riesgo de que su propuesta constitucional de reforma electoral no sea aprobada en el Congreso de la Unión, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, anunció que ya tiene “un plan B” para lograr su objetivo, es decir, una iniciativa para cambiar leyes secundarias con el objetivo de que los consejeros electorales puedan ser elegidos por voto popular directo.

En este sentido, agregó el mandatario, su nueva propuesta de reforma no necesitaría de mayoría calificada en el Congreso de la Unión para que sea aprobada, pues la iniciativa no tendría carácter constitucional.

“Entonces, que ya de una vez se resuelva lo de la reforma constitucional y como es tan importante el que hay democracia, pues es probable que yo envíe una reforma a la ley que no requiere de dos terceras partes, un plan B”, agregó el político tabasqueño.

“Es que es posible que, sin violar la Constitución, se pueda proponer en una ley o una reforma a la ley electoral, que se elijan a los consejeros y magistrados del INEI y del Tribunal, que sea posible que no haya plurinominales, que en vez de 500 sean 300, a ver si existe, de acuerdo a lo que establece la Constitución, la posibilidad de hacer una reforma”, apuntó.

Y lo que sucede, es que pese al optimismo que tuvo en su momento el presidente López Obrador, lo cierto es que en las últimas semanas se ha observado un creciente rechazo a su propuesta de reforma electoral tanto en partidos políticos como en la sociedad civil, por lo que ahora, el mandatario explora una alternativa que pueda sacar adelante a través de su partido Morena y sus aliados (el PT y el Partido Verde).

López Obrador consideró que la urgencia de los partidos de oposición, PRI, PAN y PRD, por discutir a la brevedad el proyecto de reforma electoral se debe a que Morena y sus aliados carecen de los votos necesarios, las dos terceras partes de las Cámaras, para sacar adelante la reforma que modifica la Constitución.

“Lo que quieren los opositores que ya están juntos, PRI, PAN y PRD, lo que quieren es que ya se vote porque saben que posiblemente no se llegue a los 333 votos en la Cámara de Diputados, en la Cámara de Senadores es lo mismo. Esto pasó cuando la reforma eléctrica.”, advirtió López Obrador.

Es importante que la gente sepa que se trata de una reforma constitucional y para que se apruebe no sólo se requiere la mayoría simple, son dos terceras partes, no es mayoría, estamos hablando que si son 500 para que se apruebe una reforma constitucional se necesitan 334 votos, entonces no es fácil”, reconoció.

En su nueva arremetida contra los opositores a su reforma, el jefe del Ejecutivo federal acusó una campaña en contra de su proyecto y señaló a los medios de comunicación de apoyar la causa de la desinformación.

“Entonces informar es básico porque manipulan mucho y los principales responsables, desde luego los oligarcas que son los patrones, los dueños, pero el conducto, las correas de transmisión son los medios de información. Es increíble el nivel de manipulación y el efecto que tienen”, acusó López Obrador.